Ya
hemos visto anteriormente todos los fraudes y problemas qe acarrea
Internet y como debemos de evitarlos. A la hora de hacer un pago
online no nos librarnos. La técnica utilizada para favorecer el
fraude online e denomina combosquatting. Muchas personas caen en la
trampa por lo que no tenemos que avergonzarnos. Si nos ocurre
simplemente debemos aceptarlo, evitar que nos vuelva a ocurrir y
aconsejar a nuestro entorno para que no le ocurra lo mismo.
No
quiere decir que todos los pagos online sean fraudes. Existen
muchísimos pagos que se realizan de forma segura y muy fiables.
Evitar las ofertas muy llamativas y los correos electrónicos de
precedencia desconocida.
Para
garantizar la seguridad de nuestras cuentas debemos seguir una serie
de pautas. Los TPV virtuales son la forma más segura de pagar con
tarjeta de crédito online. Con este método las entidades bancarias
se encargan de revisar que todo va según lo debido.
A
la hora de realzar una transferencia bancaria o utilizar las
plataformas de pagos digitales no suele existir tantos inconvenientes
más allá de los problemas que puedan surgir por nuestra parte.
Una
de las opciones más seguras es el pago contra reembolso, pero no
todas las empresas lo aceptan o puede implicar un coste adicional.
También
son bastantes fiables las tarjetas prepago: manejas y gastas tu
dinero de manera digital.
Con
la aparición de los Smartphone apareció la tecnología NFC. Permite
que nuestro móvil funcione como tarjeta de crédito, gracias a la
tecnología inalámbrica. Sin embargo existe un gran riesgo, pues en
caso de que perdamos nuestro teléfono cualquier persona podrá
acceder nuestra cuenta bancaria.
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